nos piso había sido añadido en época reciente al edificio. --Tengo la sospecha --dije yo arremangándome las faldas y poniendome a horcajadas en el alféizar-- de que la pobre María se ha largado siguiendo la misma vía que voy a utilizar ahora. Salí a una azotea erizada de antenas de televisión y alfombrada de un manto excrementicio depositado por las aves que anualmente cruzan nuestro firmamento en busca de otros climas. --No vendría mal un baldeo --comentó la Emilia reuniendo