, que es lo que somos para nosotros mismos y ante nosotros mismos o, lo que a estos efectos es equivalente, ante Dios y para Dios. El sentido del honor queda así desligado de sus vínculos de origen y pasa a remitirse a compromisos ya no públicos, sino íntimos; ya no formales, sino de contenido; ya no interpersonales, sino de la individualidad consigo misma, es decir, con sus propios principios, sus propias convicciones, sus propios sentimientos.
RAT:062.35
REMITIRII.1 - Señalar [a una entidad] a modo de referencia