con él ese extraño Alter Deus, tan chocante y contradictorio en las entrañas de cualquier monoteísmo, que es el malo; esto es, el diablo. Sin diablo, el monoteísmo amenaza acabar deslizandose en panteísmo, y el panteísmo resulta sospechoso, intranquilizador o hasta repulsivo porque disuelve, o al menos aguachina o difumina, la contundencia de la imagen de Dios, la enérgica solidez monolítica de la existencia que de él se predica, que tan sólo se inflama y vivifica en
RAT:166.10
RESULTAR.1 - Ser, parecer o mostrarse [algo o alguien] [de la manera que se indica]