que y Javi practicaban la vela en el lago. De la cocina llegaba el olor de las compotas que preparaba mamá... ¡Hace tanto tiempo de eso! Moncho opina que debería vender esta propiedad, pero nunca lo haré. Sería como subastar mi propia vida y la de todos nosotros. La última vez que estuvimos reunidos aquí fue... (Con una sonrisa.) ya en el siglo pasado, hace doce años, por el cumpleaños de papá. Nada parece haber cambiado