y de las sombras. El único rostro era el de ella, truncado, solitario y atroz, y la única sombra la de su cuello, ese moretón helado en la palidez del cuello. ¿Cómo era posible que no pudiese unir con sus ojos la cabeza y el cuello? ¿Acaso la violencia de sus manos había separado ambos sin que él lo advirtiera? Haz otro esfuerzo por ver. Quizá no sea ella sino una figuración, al igual que la pérdida de
MIR:121.32
UNIR.3 - Poner [algo] más próximas [a dos entidades]. Acercar