la fregadero lleno de platos, cubiertos, vasos y ceniceros sucios y sartenes y cacerolas grasientas. No recordaba, sin embargo, por qué había elegido aquel restaurante, qué lo distinguió para él. Después de dar tantos tumbos por la vida fiandolo todo al escaso dinero que sus padres le enviaban, a los oficios eventuales y a su propio sentido indócil e inmediato de la existencia, tomó este lugar de anclaje, bien con la mansa costumbre de un oficinista solitario, bien
MIR:074.09
FIARI - Vender a crédito, sin exigir el pago inmediato