sino a las minorías. Sus grandes errores y delitos han sido más bien escándalos sexuales o financieros. Han ejercido el poder --o los riesgos de la oposición-- con moderación y relativa inteligencia. Este cuadro sería incompleto si no se agregase que su política ha sido la de la facilidad y la complacencia. Idólatras del statu quo y especialistas en la componenda y la transacción, han mostrado idéntica blandura ante el increíble egoísmo de las masas y las élites de sus países que